domingo, 20 de enero de 2008

El aumento del salario de los diputados...

Indignación es probablemente la reacción mas común a la noticia aparecida en primera plana el sábado acerca del supuesto aumento salarial de los diputados. A mi en lo personal me provocó esa risa que causan algunas cosas que dan tanta cólera que tenés que canalizar la emoción de una manera socialmente aceptable.

Aún cuando despues aparecieron diputados de las fracciones mayoritarias enredando mas el asunto - porque de aclarar no queda nada claro -, lo cierto es que queda claro la calaña de gentes que se encargan de promulgar las leyes de la República. Aún si devuelven los cheques, o si donan la mitad de los siguientes cheques del año a la solidaridad (jajajaja, comonó), la confirmación de que la Asamblea Legislativa actual es la institución en la que menos se puede confiar como ciudadanos, ya está hecha. Y es que la prensa nacional embarró a todo mundo, asi que si el asunto no es cierto, si fue una confusión, si son "otros gastos", etc... el daño a la ya de por si devaluada imagen de los diputados ya está hecho. Si algo puede sacarse de esto es que quizá algo peor no puede esperarse de ellos como diputados, o talvéz si...

Victor

sábado, 19 de enero de 2008

Hasta siempre, "Mamita"...



Hay maestros que se vuelven parte de la historia de una institución educativa. Algunos, en son de broma, dicen que ya están inventariados por la institución. son maestros que por diversas razones se quedan en la memoria de quienes pasaron por las aulas de esas instituciones, y de quienes siempre se preguntan los ex-compañeros sobre qué habrá sido de ellos.
Baltazar Molina fue, además de un profesor de larga historia dentro del Instituto Técnico Ricaldone, uno de los profesores que se ganaba a los alumnos por su carisma, su buen humor, y porque casi siempre se ponía del lado de ellos. Creo que casi nadie de sus alumnos le llamaba profesor Molina, su cercanía a nosotros llevaba a decirle su apodo: Mamita. Yo lo recuerdo de mis clases de biblia y de ética cristiana, y por sus bromas, y que siempre me saludaba con una sonrisa: "Hola, Victor".
Hace poco le vi nuevamente, para la celebración de los 50 años de fundación del colegio, y siempre me saludó del mismo modo. Hoy por la mañana me avisaron de que ha pasado a formar parte del inventario del cielo. Seguro alla muchos de sus ex-alumnos le reconoceran y le dirán, "¿Qué ondas, Mamita?".
Algun día yo tambien lo volveré a saludar, cuando -como dice mi abuelo - estire las alpargatas. Hasta entonces, Mamita.
Victor

David y Sir Woody expresan sus condolencias también.

miércoles, 16 de enero de 2008

16 de Enero

Hoy vi a unos estudiantes recien graduados de bachillerato comentando que les habían preguntado sobre el 16 de Enero. Dijeron no haberse acordado en el momento. Posiblemente dentro de unos años lo recuerden menos.



Quizá "l@s bich@s RBD" - así les llama un gran amigo mío a la generación que recién va ingresando a las universidades - no tengan suficientes recuerdos de el día que se firmaron los acuerdos de paz. Quizá otros tengan explicaciones buenas para éste fenómeno, y quizá no sea un fenómeno generalizado (dos jovencitos no es una muestra representativa de una población, lo sé) pero creo que es válido preguntarnos que hemos hecho nosotros, quienes si recordamos lo que pasó en ese día, quienes fuimos a alguna de las plazas - posiblemente salgamos con mis papás en el mar de gente de esa foto de la derecha - , o quienes vimos por televisión el momento de la firma, para que éstas nuevas generaciones sepan el valor que tuvieron esos acuerdos.



Creo que es necesario que quienes nos escondimos de las balas detras de los colchones de las camas, los que cuando suena el motor de un avión militar recordamos el sonido de las bombas, los que con la reventazón de cuetes del 31 de diciembre tenemos recuerdos de las balaceras, hagamos memoria de ese momento y rescatemos no solo el recuerdo para las nuevas generaciones. Es necesario que rescatemos los valores básicos de esos acuerdos y tratemos, 16 años más tarde de finalizar lo que ha quedado inconcluso. Para ello es necesario recordar, reflexionar, y hacer. Es necesario exigir que las víctimas y victimarios de esa guerra reciban justicia, que las raíces de ese conflicto sean de una vez arrancadas de la estructura social de nuestra sociedad - ahi nace casi todo conflicto humano -, es ncesario hacer funcionar correctamente las instituciones que nacieron de esos acuerdos - y que de paso se desliguen del circo partidista -. Mas allá de eso, es necesario despertar y volver a ese pasado que no fue un mal sueño, si no una realidad que dejó miles de muertos y una sociedad lacerada y con divisiones profundas que se ahondan cada vez más.



Dicen que lo que no te mata te hace más fuerte. Si se cumple esa premisa, quiere decir que si sobrevivimos a esa guerra somos hoy más fuertes que entonces. Volvamos entonces a esos recuerdos para sacar de ellos lo que nos lleve, con las acciones del presente, a ese futuro mejor que todas y todos anhelamos.



Saludos a todas y todos.



Victor

lunes, 14 de enero de 2008

Jue!

Un frenético inicio de año ha sido el mío. Entre que empiezo a trabajar y que hay muchas cosas que van pasando en el día a día me ha quedado poco tiempo para ver hacia atrás y ver las cosas que quise hacer y que ahora casi no puedo.

Pero vamos, así es la vida, no. O le tomás el pulso y agarrás las riendas o vas por ahí de un lado a otro arrojado por ella. Es cierto, a veces lo que pasa en nuestras vidas parecen hacerte el navegante de una cascarita de nuez en medio de siete tsunamis que vienen a darse de frente unos con otros. Pero doy fe que aún si se cayó la nave en que ibas, podés ir flotando con algún acierto de ir mas allá de lo que creías. Y bueno, mas que ello, podés darle sentido a todo eso que vivís y sacar lo mejor y más en esas horas.

Hace poco leía una carta que me hice a mí mismo hace más de un año y medio, mientras hacía vacaciones y una pérdida reciente me sumía en una tormenta horrible. No soy de los que suele darse una palmadita en el hombro, pero he de decir que haberme abrazado a mí mismo - mi única tabla de salvación al alcance, fuera de Dios - fue lo mejor que pude haber hecho. Y cavilando sobre eso y sobre un libro (El hombre en busca de sentido, de Viktor Frakl; lo recomiendo mucho) que ésta semana terminé de leer por segunda vez, he andado viendo varias cosas que poner en orden en mi vida.

Posiblemente Alta Hora de la Noche será una de ellas. No es que esté desordenado, a la larga ha ido al paso de mi vida, pero en cierto modo el blog ha ido evolucionando a un espacio de opinión/reflexión sobre la realidad antes que la idea inicial que era un blog donde ir plasmando ideas sobre mi desenvolvimiento en el mundo. Y eso no es nada malo, si no que bueno, es una suerte de arroz con mango que no a todo el mundo cae bien.

Desde hace días vengo calentando, mas en serio que la primera vez que lo hice, la idea de separar la actividad bloguera de opinión/reflexión sobre la realidad nacional de mis catarsis personales. Lo seguiré meditando por el momento, pero es una de tantas cosas que se van dando en mi caminar por el mundo.

Aprovecho para comentar un par de cosas. Me ha llamado la atención la cobertura que los medios han hecho del proceso de elección del candidato de ARENA, a lo que se ha dado más importancia que a cosas como el incremento sustancial de asesinatos en lo que va del mes, la incesante subida de los precios de la gasolina, y otros problemas de mayor relevancia que un proceso de elección que dista de ser trascendental para la vida nacional en el futuro inmediato.

Otra cosa que me ha llamado la atención es la muy completa guía que venía en la edición dominical de La Prensa Gráfica acerca de los terremotos, y la prevención y mitigación de riesgos asociados a los mismos. La leí de inicio a final y fuera de alguna que otra cosa de forma que pudo estar mejor me parece una excelente iniciativa de parte del a cooperación japonesa el sacarla al público.

Sería grandioso si en lugar de tanta publicidad los principales diarios del país fueran sacando ese folleto por partes, para quienes no la recibieron. Y ojalá la regalaran en las alcaldías en lugar de regalar el diario de el partido que está en el poder en cada municipalidad. Sería de mas provecho. Y no sólo eso, si no si también nuestro ciudadano presidente cediera sus quince minutos de los domingos en cadena nacional para dar esos contenidos a todo el mundo; yo no me quejara de que me corten la señal de cable para dar eso en los canales abiertos.

Y es que de verdad es necesaria la prevención, y mitigar los riesgos existentes en el país para evitar lo ocurrido en 2001, cuando dos terremotos sacudieron el país en el transcurso de un mes, llevándose muchas vidas y jodiendo la ya de por si jodida economía nacional.

Mis recuerdos sobre esos terremotos se los cuento otro día. Y también mis ideas sobre la prevención de la campaña sucia y otras reflexiones sobre las ideas de Frankl y otras cosas mas que quisiera contarles ahorita pero que ya debo dejar porque ya es noche y me debo levantar a las cinco para llegar a tiempo a laborar.

¡Feliz inicio de semana, crazy diamonds!


Victor