lunes, 17 de mayo de 2010

Estado del cambio

Mientras avanza el tiempo se acaba la ilusión (y la paciencia) y de a poco se le va viendo más claro el fustán o los fustanes (por aquello de la virtual dualidad de poderes) al gobierno del cambio. El mensaje recibido hasta hoy tanto de Funes como del liderazgo del FMLN es muy cercano a aquel de Groucho Marx quien decía "Estos son mis principios. Si no le gustan tengo otros". Hasta el momento la incoherencia con el mensaje de la campaña electoral ha calado hondo en la ciudadanía que votamos por un cambio, el olor a decepción y a una suerte de derrota anticipada se huele en el ambiente mientras quedan un par de años para las próximas elecciones municipales y legislativas. La derrota no en el campo electoral si no en la apuesta por una alianza que hasta hoy ha dado frutos mediocres y la sensación de estar peligrosamente cerca de devolverle el poder a la derecha.

lunes, 10 de mayo de 2010

La mamá de Roque

Se antoja imposible separar el tema del día de la madre del sentimentalismo que rodea su figura. No evito pensar en esa mujer de poco más de un metro y medio que me cargó por nueve meses en su vientre, y que durante años intentó desde lo mejor que pudo hacer de mi un hombre de bien. La sociedad le impuso un rol jodido, en un contexto jodido y para terminar de "amolar", con un cipotío que no jodía mucho pero cuya salud era un reto constante. Pienso en ella y en sus sacrificios, los cuales en situaciones normales olvido con facilidad, y me duele un poquito cada palabra que se ha ido más allá de lo que en realidad quería decir. Pienso también en la mujer a quien encargó mi cuidado mientras ella trabajaba, que durante los primeros diez años de mi vida compartió con mi mamá la tarea de ayudarme a crecer sano y bueno, desde las limitaciones de cada una.Como dije, es inevitable pensar en ellas, en mis dos mamás.

Hoy es 10 de mayo y no solo es el día de la Madre. Hace 35 años fusilaron a uno de los salvadoreños más universales. Lo fusilaron quienes decían compartir similares ideales (Gracias a Ixquic podemos afirmar con toda propiedad lo del fusilamiento, por si hay quien tiene dudas), lo fusilaron quienes decían querer luchar contra el poder establecido; y lo hicieron usando los mismos métodos y dando similares excusas: si unos buscaban limpiar la patria de la amenaza roja con matanzas, otros defendían la pureza prístina del colectivo revolucionario matando al que hueliera de lejos a lo que se pareciera a la sospecha.

No sé cuando murió la mamá de Roque, doña María García. Pero creo que ella, como muchas otras madres de desaparecidos y desaparecidas, como las madres de aquellos y aquellas que fueron dejados entre las piedras del Playón, las madres de quienes fueron enterrados y enterradas bajo las instalaciones de las cárceles clandestinas, las de quienes fueron aventados a una fosa común como si fueran despojos de perro atropellado, las madres a las que les arrebataron de los brazos a sus hijos e hijas para luego ser vendidos a parejas de extranjeros, las madres de fusilados y fusiladas por juicios sumarios a media montaña por sus deméritos en la lucha, las madres que siguen esperando que sus hijas e hijos aparezcan aunque sea en una tumba para poderles ir a llorar, las madres de tanto joven que muere víctima de la delincuencia, todas esas madres merecen que se sepa la verdad de la muerte o desaparición de sus hijos e hijas.

La idea de la madre que pervive en nuestra cultura la vincula con el perdón, más no con el olvido. También la relaciona con la idea de decirles la verdad, aunque ello acarree una regañada de su parte, a la madre se le dice la verdad porque ella es quien instruye en las primeras nociones de justicia: cada acción tiene una consecuencia. Pues eso, a cada madre corresponde decirle la verdad para que se imparta justicia, y se reciba el perdón, y nunca más volverlo a hacer. Ojalá pues, entendamos que el compromiso con la verdad y la justicia serían un verdadero homenaje a las madres salvadoreñas, no la vacuidad de la publicidad oportunista.

Un abrazo grande a cada madre que lee este espacio

Victor

jueves, 6 de mayo de 2010

4 años

Hace cuatro años, en una noche como esta, inicié este espacio sin tener mayor idea de lo que quería hacer con él. Hace tiempo pasé de la necesidad de expresarme de forma personal sobe mi vida a necesitar hablar sobre el país y reflexionar sobre lo que ocurre a mi alrededor. Muchas cosas han pasado en este tiempo y muchas de las más hermosas han ocurrido en parte por éste espacio, que es también de ustedes.
No sé que más decir, si no gracias a quienes me visitan seguido, a quienes me siguen con un lector de feeds o por el correo electrónico. Gracias por sus comentarios a mis posts y a quienes me han hecho saber de uno u otro modo que este pequeño esfuerzo de poner en letras lo que pasa en mi cabeza, le ha servido para algo. Gracias especialmente a quienes han trascendido de la interacción blogger-lector y se han convertido en mis amigos y amigas. Ese resultado inesperado, es lo más hermoso que me ha dejado este espacio y que me anima a seguir hablando de lo que pasa en mi mundo. Y en virtud de ello, renuevo imagen y compromiso de venir a escribir más seguido. Nuevamente gracias a todos y todas, y nos seguiremos leyendo.

Victor

lunes, 3 de mayo de 2010

Unas reflexiones a contracorriente

"Mis éxitos no son míos: el camino para llegar a ellos fue preparado por otros. El fruto de mis trabajos no es mío, pues yo estoy preparando el camino para lo que van a lograr otros. Tampoco mis fracasos son míos, sino que pueden derivar del fracaso de otros, aunque también están compensados por los logros de esos otros. Por tanto, el significado de mi vida no debe buscarse únicamente en la suma total de mis logros. Sólo puede verse en la integración total de mis éxitos y mis fracasos, junto con los éxitos y fracasos de mi generación, mi sociedad y mi época."
Thomas Merton

Alguien me dijo un día de estos que la vida en el mundo de ahora parece un sinsentido, y más en este país en que vivimos. Y es justamente por ello creo que bien vale reflexionar sobre éstas líneas anteriores, especialmente hacia el final. Se me ocurren unas cuantas preguntas y algunas ideas al respecto:

Aquí y ahora ¿qué logros hemos construido como generación, como sociedad, como personajes de ésta época que hace muchos años se anticipaba como maravillosa? ¿Adonde se ha ido la esperanza? ¿Qué hicimos para abonar a ella? ¿Cuándo dejamos en manos de alguien más lo que se suponía era nuestro sueño? ¿Qué lecciones aprendimos de nuestro pasado? ¿Qué de esas lecciones hemos aplicado hasta ahora? ¿Adonde hemos dejado las gotas de sangre que abonan nuestro presente? ¿Qué hemos hecho con los sueños de quienes nos antecedieron en el trayecto?¿Cuáles son nuestros sueños hoy? ¿Qué hemos de hacer vos y yo para alcanzar esos sueños? ¿Cómo contribuís vos a que esta sociedad concreta tenga un logro? ¿Qué haces vos y tus amigos, tu generación para transformar el mundo para la generación siguiente? ¿Es un éxito esta realidad que les dejamos?

Creo que aquí y ahora bien haríamos en callarnos un momento y así ir contracorriente del mundo que nos llena del ruido que nos impide escucharnos a nosotros y a quienes nos rodean. Bien haríamos en callarnos y dejar de despotricar contra todo lo que no está al alcance de nuestras manos, como nos enseña el quejoso mundo en que vivimos. Bien haríamos en ir contracorriente del mundo que nos conecta más en apariencias pero nos vuelve cada día más islas, y sentarnos lo suficientemente cerca de los demás para poder escucharlos. Bien haríamos en ir a la contra de la miopía del mundo que vive intentando avistar el futuro sin ser capaz de enfocar lo que tiene más cerca de sus manos. Bien haríamos en detenernos y mirar al pasado que el mundo nos obliga a olvidar rápido, y volver nuestras miradas sobre la memoria de quienes dieron su vida, sobre la memoria de aquellos a quienes les fue arrebatada la oportunidad de bregar con nosotros este día.

Hallaríamos que no estamos solos. Hallaríamos nuestra voz y la voz del hermano que es tan parecida a la nuestra. Hallaríamos que antes de alcanzar el mañana tenemos que poner bien la vista en lo que esta aquí cerca, en lo que está ahora. Hallaríamos en el pasado, en quienes nos dejaron un mundo para que nosotros lo siguiéramos construyendo, un punto de partida para alcanzar nuevos logros para esta generación y las que vengan. Todo con nuestras manos, con nuestras voces, con nuestros sueños, no con los de quienes hoy se retuercen en los miles de brazos de esa medusa que es el poder, estando a punto de volverse otra inútil estatua para la historia.

Detenete un momento y pensá en ello.


Víctor